miércoles, noviembre 22, 2006

Gatas

Aunque ella hace un poco más de ruido.

Hay algo felino en el ir y venir de su casa, cómo va y viene sin aviso, cómo sube las escaleras con idiferencia y las baja también indiferente. Algo hay en la falta de rigor, en la infidelidad, en el no saber qué será de ti mañana frente al dónde vas a estar mejor que aquí. Algo en la interrupción del trabajo diario, en la celebración, en la caricia suave que remite a otras caricias de otras gatas que otros días iban y venían. Algo, también, en acostarse en una cama inmensa y pensar ojalá venga mañana y descansar porque no importa, porque igual mañana no, igual tampoco pasado, pero acabará volviendo porque algo hay de gata en todo esto.

Y entretanto ahí viene, está nerviosa, tiembla enroscada entre sus piernas, quiere contarle algo: Hace poco, un par de días, trepé a un árbol y no supe cómo bajar.

jueves, noviembre 16, 2006

(In)definiciones

No son amantes
(no se tiran al río
sin pensar que es invierno
y que el frío cala hasta los huesos).
Tampoco piensan que el invierno
pueda besarles tan hondo.
Hablan hasta perder el tiempo,
hasta encontrarse,
cada uno en su orilla,
acercándose
mientras creen que es el otro
el que se acerca.

No son amigos.
(no se llaman
para decirse ven,
tengo un cadáver en el armario).
Tampoco piensan que la muerte
les pille despistados.
Hablan hasta inyectarse vida,
hasta encorvarse,
cada uno en su espalda,
acercándose
mientras creen que es el otro
el que se acerca.

No son pareja.
(no se lamen las heridas
con lengua corrosiva
de esparto y dependencia).
Tampoco piensan que la lengua
pueda renunciar a sus paseos.
Hablan hasta pender de un silencio,
hasta enzarzarse,
cada uno en su tierra,
acercándose
mientras creen que es el otro
el que se acerca.